Hay cosas que de Chile me dan asco, como por ejemplo; que una entrada para ir a ver a un artista cueste más de lo que es un sueldo mínimo de este país, que de todas maneras irá gente y pagará esa cantidad de plata. También siento asco del bloqueo periodístico y que consigo existan periodistas más interesados en vender que en informar, siento asco del eclipse de la copa América y que desvía la atención de la muerte rápida, corrupta y vergonzosa de la política chilena, y no es que lo diga de resentida o inconforme, porque yo también disfruto del fútbol, pero ¿no les molesta algo?
Pero hay cosas que más que asco, me hace sentir tristeza. Y es que existan personas más preocupadas de las medidas de apremios para Vidal por el cagazo que se mando, que por el paro docente que sin duda es muchísimo más importante que la copa América.Me da mucha tristeza esa organización espontanea que hizo un grupo de hinchas y fue a protestar por la "livertad" de Vidal , y no exista la misma organización o ganas para luchar por un derecho en común que todos deberíamos tener. Y con esto me refiero a una educación digna y de calidad.
Porque no hay horario de profesor que aguante, porque creemos que por tener vocación, no se deberían quejar por sus trabajos.
Siento tristeza y asco por lo que lentamente y frente a nuestros ojos se comienza a transformar nuestro país, nuestra sociedad.
Me da tristeza que se defienda más la producción que la naturaleza. Y sentí tanto asco el día en que me sumergí en Caleta los Molles y vi el fondo marino lleno de pequeños fragmento de papel higiénico, que inundaban la visión al mismo nivel de ver arena o el azul del mar, sentí tristeza y asco, porque no hacemos nada, tenemos solo una vida, solo una tierra y seguimos preocupándonos de comprarnos la entrada más cara para ir a ver a nuestro artista, en preocuparnos por la clasificación de Chile, por que a Vidal no lo castiguen, por producir más. Que asco y tristeza siento hoy.
